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Centro de Estudios Filosóficos
ALÉTHEIA
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Como hemos tenido oportunidad de estudiar en detalle en la sesión anterior, Diógenes de Apolonia demostró -en su original teoría híbrida de la naturaleza- ser un claro heredero de la tradición milesia al haber asimilado las ideas estructurales del materialismo físico de los herederos de Tales.
Sin embargo, si nuestro filósofo se hubiera limitado a desarrollar un nuevo modelo físico no sería un verdadero puente, un eslabón entre el final de la edad arcaica y el periodo clásico. Por ello, además de una filosofía de la naturaleza, Diógenes cultivó algunos de los temas de reflexión que caracterizaron la segunda edad de la filosofía.
Tras el gran giro antropológico introducido por Sócrates todos estos intereses giraron en torno a una sola cosa: el ser humano.
La antropología, la ética y la política pasarán a ser el centro de todas las discusiones.Y fue, precisamente, Diógenes de Apolonia el primer pensador que comenzó a centrar la mayor parte de su reflexión en el hombre, empezando por analizar su naturaleza física para después adentrarse en sus rasgos emocionales.
Con su estudio de los sentidos y las pasiones, Diógenes desarrolló las primeras teorías en torno a la psicología humana de la historia de la filosofía.
A lo largo de esta sesión leeremos un interesante conjunto de fragmentos que nos revelan su enorme dominio de la fisiología del cuerpo humano así como sus tesis acerca del funcionamiento de nuestra mente.